La mexicana Ambar Garnica se llevó la medalla de bronce en la categoría de 68 kilogramos en la lucha estilo libre, en los Juegos Panamericanos de Lima 2019, donde la estadounidense Tamyra Mensah se llevó la presea de oro.

Mensah se quedó con el primer puesto luego de vencer a la canadiense Olivia Di Bacco por marcador de 4-0, mientras que el tercer sitio fue para Garnica y la cubana Yudari Sánchez.

En su camino, Garnica venció a la hondureña Saidy Chávez en cuartos de final y en las semifinales fue ante la peruana Yanet Sovero por 8-5, en el Coliseo Miguel Grau.

La gladiadora señaló que la primera lucha con Honduras fue tranquila, sin embargo, la más importante para luchar por las medallas. “Sabía que si ganaba la primera podía pelear por las medallas. Son mis primeros Juegos Panamericanos y mi segundo evento internacional, y elegí este deporte porque me gustan mucho los deportes de combate y como la lucha no hay ninguno. Es un deporte completo que te forja desde el carácter hasta el físico.

Fue un camino súper duro, súper difícil con muchas cosas en contra y muchas a favor, fueron días difíciles antes de la competencia, veníamos mentalizadas a que si teníamos la oportunidad, íbamos a pelear para no dejar ir la medalla. Iba perdiendo por el bronce y mi cabeza decía tú tienes que ganar por ti, tu familia y por México y no puedes aflojar, me quedan como cinco segundos y no hice que luchar hasta el minuto cero”.

Mencionó que también la semifinal fue una de las peleas más complicadas con Estados dos que es una rival fuerte, “me sentí bien, pero no satisfecha, pero consiente que se puede hacer un mejor trabajo para lograr algo más”.

Manifestó que rescata muchas cosas de esta justa continental, ya que lo principal es nunca dudar del trabajo que se hace porque se ve reflejado en todo lo que entras a hacer, “me sentía segura, sabía que podía y eso fue lo que refleje parada en el colchón”.

Concluyó que el próximo mes se realizará el Campeonato Mundial, al cual espera asistir y buscar posicionarse de los primeros lugares, ya que se otorgan las primeras seis plazas olímpicas, por lo que tiene una motivación extra,

“No veo lejano llegar a Tokio, en los Juegos Centroamericanos no pude participar, pero ahora que estuve a nivel panamericano que es más amplio, me doy cuenta que no estamos tan lejos y que estamos a nada de estar en los primeros lugares”.